PROTEGER NUESTRA VIVIENDA EN VACACIONES
Al dejar nuestra casa en vacaciones es importante que tomemos algunas precauciones. Es importante intentar no dejar signos externos que levanten sospechas de que estamos ausentes, como no bajar totalmente las persianas o que algún familiar o vecino de confianza nos recoja el correo.
Cerrar el agua, el gas y la luz, y cerrar correctamente todas las puertas y ventanas.
No debemos dejar joyas ni objetos de valor en nuestra ausencia, podríamos consignarlo en una caja fuerte de un banco o depositarlo en algún lugar seguro.
Seguro para la casa que dejamos
Los seguros para vacaciones se contratan por tiempo muy limitado: uno o dos meses en los que la vivienda está desocupada. El inconveniente que tienen es que por estar vacía supone para la aseguradora un riesgo de mayor siniestralidad que si la vivienda se encuentra habitada, por lo que la prima se nos incrementa notablemente.
La diferencia en la prima a pagar en función de si la vivienda está o no ocupada puede llegar a ser de hasta el 300 %. Así, con lo que pagamos por un seguro que nos cubra dos meses que vamos a estar fuera, pagaríamos la mitad de un seguro anual. Lo que cabe hacer es cerciorarnos de que nuestro seguro multirriesgo de hogar contemple una prima para todo el año que contemple que la vivienda está ocupada la mayor parte del año (diez meses) no habiendo recargos sobre la prima. En caso de un robo u otro siniestro durante las vacaciones la aseguradora deberá pagar las indemnizaciones correspondientes.
La conclusión a la que llegamos es que por un poco más de lo que nos supone el periodo del seguro de vacaciones tenemos seguro para todo el año con las consiguientes ventajas que ello conlleva.
|