Los medios de pago y servicios financieros a distancia:
Por una regulación completa de las nuevas tecnologías para los consumidores y problemas de seguridad y fraude.

Dentro de lo que denominamos genéricamente "medios de pago", se engloba una serie de productos y servicios que nos facilitan las entidades financieras, y de uso altamente extendido en la actualidad.

Productos y servicios todos ellos, heterogéneos entre sí, que hacen que el marco legislativo que los regula sea enormemente difuso, y difícil de concretar. Así, mientras cheques y pagares se encuentran con una abundante y clara legislación española, las tarjetas no poseen una regulación especifica, pese al esfuerzo legislativo comunitario, llevado por la proliferación del uso de estos productos en años recientes.
Además, debemos distinguir entre aquellos medios de pago que sólo permiten movilizar nuestro dinero, de aquellos que incorporan un crédito del que poder hacer uso.

Desde la instituciones comunitarias, se ha puesto el acento en el desarrollo de los medios de pago, sobre todo, aquellos que llevan la etiquetas de electrónicos, que son indudablemente, lo que mayor presente y futuro van a tener en la relaciones económicas dentro de la Unión.

A este respecto, desde Bruselas se ha considerado que el desarrollo de los medios de pago electrónicos guarda una estrecha relación con el desarrollo de una autentico mercado interior europeo, y que la libre circulación de mercancías y capitales solo llegará a ser plenamente eficaz si sé disponer del apoyo tecnológico de este medios de pago.

Además, es importante formular algunos principios generales de comportamiento en las relaciones usuarios-entidades que eviten situaciones de uso fraudulento de las mismas en caso de robo, extravío o cualquier actividad ilícita realizada contra la voluntad del consumidor.